El coronavirus no es incompatible con la reivindicación feminista en Ourense. Esa es la visión del colectivo Galegas 8-M que ayer anunció que seguirá con la manifestación por el centro de la ciudad y las principales calles de la ciudad. Una representante del colectivo, Lucía Cedrón, explicó que “en la pandemia se aprovechó para reducir los servicios, muchas mujeres dejaron de ser atendidas”.
Desde el colectivo señalan que “el derecho a manifestarse no es incompatible con cuidarnos y no queremos que ninguna mujer deje de participar porque piense que no es un espacio seguro”. Las representantes del colectivo explican que tienen programado un protocolo de seguridad, con distancia social y mascarillas.
El lema que seguirá la marcha será “Sen coidados non hai vida”, que partirá desde la Subdelegación hasta el hospital ourensano. Mandan un mensaje de seguridad y prevención, pero también quieren insistir en que la concentración de la mañana en la Plaza Mayor con diferentes proclamas y defensas de derechos no se producirá. Durante la mañana del 8-M, tenía lugar una serie de actuaciones para reivindicar el papel de la mujer en todos los sectores de la sociedad que este año no se realizará.
Ayer bajo los soportales de la Plaza Mayor, enfatizaban en la unidad para reivindicar un día importante, pero también incidían en la necesidad de cumplir la prevención y la protección en materia sanitaria en tiempos de pandemia.
¿Sin luz institucional?
El Concello de Ourense avisó mediante un comunicado en el día de ayer, que durante la celebración de la reivindicación anual del Día de la Mujer, que se celebra cada 8 de marzo, no podrá iluminar el Puente Romano como es costumbre, por un fallo en el cuadro eléctrico. Sin embargo, desde la Xunta de Galicia advierten que restablecerán mañana miércoles el cableado de alimentación eléctrica del Puente Romano para que se compruebe el correcto funcionamiento. “La empresa adjudicataria comunicará la reposición a los responsables municipales”, señalan.
