La evolución de los casos activos de COVID-19 en Ourense acelera su caída. En las últimas 24 horas se registraron 115 altas y 23 nuevos contagios lo que reduce a 843 el número de pacientes que actualmente conviven con el virus. 747 están en su domicilio pero 96 requieren hospitalización, 13 de ellos en UCI. La cifra de ingresos también ha bajado en la última jornada, al restar ocho camas ocupadas, lo que supone un alivio en la carga asistencial.

Tras el descanso de cinco días con motivo del Entroido, los centros educativos retomaron la actividad lectiva con 115 positivos vinculados, la mitad que antes de este período, y seis aulas cerradas.