“No soy moneda de cambio de mi partido ni de nadie. Se acabó el circo”, señalaba ayer la diputada Monse Lama, durante la rueda telemática ofrecida desde Diputación de Ourense, para informar de que abandona Ciudadanos y se pasa al grupo de no adscritos, tanto en el Concello de Xinzo donde es edil, como en la Diputación de Ourense, en la que ocupaba el único escaño de la formación naranja. Su decisión “salva” de rebote a Baltar de una moción de censura en ciernes.
El motivo principal de su abandono, señala Lama “es garantizar la estabilidad en ambas instituciones en tiempos difíciles para los ciudadanos y no apoyar circos mediáticos”. Considera que Cs la utilizó como “moneda de cambio” para propiciar un no a la moción contra de Baltar a cambio de luego conseguir un acuerdo a tres bandas con el PP, contra Jácome en el Concello, por el que los dos concejales de Cs “se garantizarían n los dos sillones”.
Monse Lama, quién llegó hace dos años a Ciudadanos tras su abrupta salida del PP, afirma ahora que deja Cs por esa “incoherencia” de su partido, al que acusa de rechazar “de forma unilateral una moción en la Diputación y luego estar negociando esa moción a tres bandas” contra Jácome. Afirma que en Cs “no saben ni ubicar Ourense en el mapa” y que nunca la llamaron en estos dos años “para aportar ideas y proyectos para la provincia”.
La concejal ratificó lo que ya era un secreto a voces que, desde el PSOE y le habían propuesto esta presidencia de la Diputación y al saberlo Baltar, le propuso lo contrario, una garantía de voto y a cambio le daría la vicepresidencia.
Ni uno ni otro. Pero Lama se convierte así en vital para la supervivencia de Baltar en la Diputación, pues él está a un voto de a mayoría. Hasta ahora tenía el apoyo seguro de Miguel Caride, el concejal y diputado díscolo de DO, que había propiciado junto con otros cuatro ediles del partido del alcalde, una denuncia contra Jácome, y al que este último había acusado entonces de estar detrás de la trama con el PP, para echarlo del Concello.
Las cosas han cambiado y cargos del PP tachan ahora de traidor” a Caride, pues él podría estar dispuesto a firmar la moción contra Baltar afirman, pues los díscolos se sienten “abandonados” por el PP.
Esta sucesión de hechos insólitos, por los que en cuestión de días, a una diputada la tientan para ser presidenta de la Diputación si firma la moción contra Baltar, o ser vicepresidenta si no la firma forma parte de trueques han salvado de golpe a Baltar y a Jácome.
Jácome y Baltar, salvados
El otro diputado de DO en la Diputación Armando Ojea, no iba a apoyar la moción contra el gobierno de Baltar. Esta postura podría haber provocado que, en agradecimiento, esta misma semana, el PP saliera al rescate del alcalde de Ourense, para apoyarle de nuevo en el gobierno municipal, pese haber roto hace cinco meses el bipartito, y cederle un edil del PP cada semana, para convocar juntas de gobierno, en tanto no se reincorpore el edil número 3 de DO, Telmo Ucha de baja por COVID.
Por lo que respecta a Monse Lama ya había abandonado el PP en febrero de 2019, es decir este mes se cumplen dos años, y pasó a no adscritos. Tres meses después era candidata de Cs al Concello de Xinzo.
Por su parte ayer Ciudadanos, tras conocer la renuncia de Monse Lama, le pide que “entregue su acta de concejal por coherencia personal y respeto a los principios éticos, así como en cumplimiento de artículo 10.3 de los Estatutos y del compromiso asumido en su Carta Ética y Financiera, documentos que recogen el compromiso de dejar el acta si causan baja en el partido” señalan.
