Ricardo Fernández en el CHUO . | // IÑAKI OSORIO

El área sanitaria de Ourense y provincia bajó ayer a los 2.240 casos activos de COVID, 169 menos que la jornada anterior, pero continúa la presiono hospitalaria, con 153 pacientes ingresados, diez más en un día, según el último balance publicado ayer por el Sergas. Un total de 18 pacientes están ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos.

En Ourense ciudad los datos tienden también a la baja y se situaban en el balance de ayer en los 787 personas con coronavirus, 52 menos que la jorrada anterior. El propio alcalde Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, comentaba ayer que había dado negativo tras someterse al test de antígenos, en el cribado al que fue convocado este fin de semana, al igual que otros 12.000 vecinos del municipio. Una cita para hacerse la prueba y detectar posibles nuevos casos “a la que deberíamos de haber acudido todos”, señaló el regidor, pero que realmente se saldó con la asistencia de solo 7.000 de los 12.000 convocados entre el sábado y el domingo. En la jornada de ayer y última de cribado masivo en Expourense, eran 6.000 las personas citadas y participaron 3.508, un 58,4% del total. De esas 3.508 pruebas de ayer, 1.891 fueron test de antígenos con 4 positivos y 1.617 PCR que están aún pendientes de procesar.

En total en toda la provincia se detectaron 84 nuevas PCR positivas. Desde que apareció el primer caso de coronavirus en la provincia en marzo del pasado año, se detectaron 13.925 casos positivos, de los cuales 11.309 están curados y 378 personas fallecieron. Se han realizado ya un total de 185.429 pruebas PCR en estos 11 meses. Por lo que respeta a los datos de afectados en residencias aportados por Política Social, ayer se retiró del cómputo por dar negativo, 1 usuarios de la residencia de Bande y , 1 usuario de Fogar Residencia Blanco Amor de Boborás. Las pruebas siguen y por primera vez hoy se hará un cribado a 400 personas alumnos y docentes, del colegio público de infantil y primaria del A Ponte, dentro del mismo centro escolar. La decisión se adoptó en colaboración con la Consellería de Educación al haberse detectado 18 casos positivos de coronavirus entre en la comunidad escolar.

Las pruebas comenzarán a partir de las 9 horas de hoy según confirmó el Sergas y se espera rematen ya en horario matinal.

Las pruebas se realizarán tanto al personal docente como a alumnos de Primaria para detectar la presencia de posibles positivos en esa comunidad escolar.

“El virus sigue entre nosotros. Una Semana Santa normal traería una cuarta ola peor que la actual”

“No podemos celebrar una Semana Santa normal. El virus sigue entre nosotros y corremos el riesgo de que nos traiga una cuarta ola peor aún a la tercera que estamos viviendo actualmente” advierte Ricardo Fernández . Habla desde la experiencia de quién ha vivido en estos casi últimos doce meses en primera línea, los estragos del coronavirus, en su condición de Jefe de la Unidad de Infecciosos del CHUO y coordinador de hospitalización del Área COVID. “Llevamos casi un año, y esta tercera ola también fue dura, aún tenemos 18 personas en UCI y sigue la presión hospitalaria. Cada uno de esos pacientes COVID ingresados, también los que están en planta, suponen un esfuerzo enorme, porque no son pacientes convencionales y hay que aplicar muchas medidas y medios humanos y sanitarios”.

Ricardo Fernández repite que “la Semana Santa no puede ser normal. En verano vimos lo que ocurrió. En Navidad con la desescalada volvimos a sufrir una situación muy delicada, que estamos viviendo hoy. Hay que pensar que sigue muriendo gente de COVID” subraya “lo pagaremos con esa cuarta ola”. Lamenta que algunas personas solo se den cuenta en la situación cuando “tienen una familiar o amigo que lo sufren”, afirma y viven las consecuencias en primera persona. Entre ellas las graves secuelas. “Acaba de publicarse un estudio en una revista médica especializada que dice que en países como Israel, donde la campaña de vacunación está muy avanzada, hay esperanza y se está demostrando que la vacuna reduce contagios y los casos de infecciones graves” indica el especialista.

“Hay que esperar a 2022”

“Esa es la esperanza, ver cómo funcionar las vacunas, pero para eso hay que esperar al menos hasta finales de este año o principios de 2022, para comprobar si hay un porcentaje de inmunidad en la sociedad suficiente, como para rebajar las medidas de prevención social”, afirma Ricardo Fernández. “Por ahora tenemos que ser prudentes y seguir con todas las medidas de prevención en marcha” advierte.