Laura estructura una frase, y la lanza al aire: “El cielo era suave y brillante”, por ejemplo, y el objetivo es que sus alumnos de Primaria, la capturen, la pasen por el colador del alma y de ahí a sus lapiceros, para que, la obra resultante, sea la traslación de sus propias emociones. Se trata de que, en esta sociedad de los alumnos papagayo, obligados a memorizar y reproducir pensamientos ajenos, cada niño exprese en el papel su propia mirada, sin interferencias. Sin estereotipos.
Es uno de los objetivos que persigue el taller que pone en marcha a partir de mañana lunes la Concejalía de Cultura de Ourense, bajo el lema “Sentidos y simplicidad” , dirigido a escolares de cuarto de Primaria de centros públicos ourensanos, con edades por lo tanto de los 9 a los 10 años.
La ilustradora Laura Tova, nacida hace 32 años, en Carballo y formada en la Escuela de Arte Pablo Picasso de A Coruña, es la encargada de llevar a la práctica unos talleres, “que pretenden sobre todo incentivar la propia creatividad a través de los sentimientos de los niños sin interferencias ajenas, o de los dibujos de la tele” .
Reconoce que en ocasiones “a partir de 9 o 10 años cuesta un poco más ya que saquen su propia creatividad interior, siempre a la hora de dibujar le puede salir un Pokémon u otro personajes. Son la generación tecnológica, no cabe duda”.
Pero al igual que hará este lunes, en su primer taller en el Colegio Mestre Vide de Ourense, “primero empezamos con un ejercicio de collage “ una espacie de calentamiento previo a esas ·“frases evocadoras que, aunque no dicen nada en concreto deben de transformar luego ellos en cosa físicas”, explica.
Reconoce que “los niños y niñas son maravillosos y apenas he notado en las aulas durante estos starters escolares, ese cambio enorme que ha supuesto para ellos también el COVID, aunque a veces se quejan de no poder abrazar a sus amigos y amigas como antes”.
Laura Tova apuesta por la potenciación de la creatividad libre, propia e innata en cada niño, antes de que se pierda.
Ella mismo y su página web, Laura Tova, dan cuenta de ello, es el ejemplo de toda una·milennial poliédrica, que ha sabido reinventarse desde la ilustración, a decenas de facetas creativas. Esta última una de las más valientes, ayudar a los niños a crear con su propia mirada. Ya lo dijo Picasso: “Todos los niños nacen artistas. Aprender a pintar como ellos, me llevó toda la vida”.
