Tras el aplazamiento acordado en la primera sesión judicial del macrojuicio de la Operación Zamburiña, hoy se dará comienzo con las cuestiones previas, en el que las defensas pedirán que los acusados declaren al final del juicio y en el que las defensas basan toda su argumentación.

Tras la prueba negativa de uno de los acusados que estuvo aislado por un contacto estrecho con otra persona que tenía coronavirus, la Audiencia de Ourense juzgará el caso donde se sientan en el banquillo de los acusados nueve presuntos traficantes y 4 policías antidroga a los que el Ministerio Público, pide penas de prisión, por “una colaboración simbiótica” para ofrecer, presuntamente, protección y “cobertura” a sus informantes.

Niegan los hechos

Los acusados niegan los hechos y advierten de que el caso partió de un anónimo con “falsedades” y señalan que por ese escrito salió la atribución a alguno de los agentes acusados del robo de armas del búnker, en el que están juzgados dos policías gemelos en otra causa y que serán testigos en este juicio.

La sesión viene marcada por el virus con especiales medidas de protección y prevención para garantizar el proceso de intervención a todas las partes en un juicio en el que las penas suman más de 100 años y en el que a la principal presunta traficante la Fiscalía pide hasta 13 años de cárcel.