El juicio maratoniano de los cinco investigados por presunto enchufismo en el Concello de O Carballiño fue visto para sentencia después de las declaraciones de todos los testigos y la falta de declaración por parte de los acusados. La supuesta prevaricación administrativa entre los año 1995 y 2005 por parte de Pachi Vázquez, Carlos Montes, Elisa Domínguez, Antonio Barge y Alfonso Prado quedará en manos de la jueza Susana Pazos, titular del Penal Nº2 de Ourense, después de que la Fiscalía mantuviera las penas a definitivas, solicitando entre 10 y 8 años de inhabilitación para los acusados, siendo la mayor para el exconselleiro y exregidor de la villa carballiñesa, Pachi Vázquez. Por su parte la defensa, representada por cinco abogados, pidió la libre absolución de todos ellos, al entender que los contratos se regían a la legalidad vigente y que sus representados no decidieron sobre la contratación de los 60 empleados en cuestión.
