Partiendo de estudios que constataban que los miedos al coronavirus eran extremadamente frecuentes y que la población joven presentaba una mayor vulnerabilidad frente al aislamiento social y el contagio, el profesor de Psicología de la Escuela Universitaria de Enfermería, José Luis Santos-Ascarza puso en marcha una investigación sobre el impacto emocional de la pandemia en el alumnado.

En la presentación de los seminarios que imparte en el primer curso del grado en Enfermería, el docente detectó “incertidumbre, miedo y preocupación” que, si bien era un estado de ánimo “esperable” por la situación de pandemia, “llama la atención que fuese tan intenso y generalizado”, afirma.

El estudio que inició se encuentra ahora en la fase de análisis de resultados y busca conocer el impacto psicológico de la crisis sanitaria en los jóvenes que inician su formación en Enfermería, valorar el impacto emocional negativo, la presencia de síntomas de estrés postraumático, el miedo al coronavirus y las conductas asociadas al confinamiento.

Tras la realización de cuestionarios entre una muestra de 32 alumnos, 26 mujeres y ocho hombres, y un primer análisis de los datos obtenidos, el investigador destaca la constatación del “miedo a contagiar a un familiar, que se contagie y pueda morir, así como que el virus se siga propagando”. Estos temores, explica, “los sentían con una intensidad entre mucho y muchísimo”. En cuanto a las experiencias emocionales negativas, avanza, “destacan los sentimientos de desesperanza con respecto al futuro, el agobio y el estrés”. Inicialmente, apunta, “no se han observado síntomas de estrés postraumático derivados del confinamiento”.

A pesar de la situación adversa que ha supuesto la pandemia y en especial el confinamiento, explica, “las estudiantes han obtenido algunas experiencias positivas: han aprendido a valorar más las relaciones personales, los beneficios de la actividad al aire libre y a apreciar más lo que tenemos frente a lo que deseamos, además de interesarse más por la gente que les importa, tanto a nivel físico como emocional”, concluye.