Un año y medio de prisión para el cliente de un bar, por lesionar al camarero, al que llegó a arrojar un vaso, y una multa de 120 euros para el trabajador, por un delito leve de lesiones. El juicio, por unos hechos ocurridos en un local de Entrimo la madrugada del 2 de agosto de 2018, se zanjó ayer con una condena de conformidad en la que ambos reconocen su culpa.

El camarero recriminó al cliente por estar acostado con los pies sobre el sofá. Quiso que se marchara del local y se produjo un altercado. Tras morder al camarero en un brazo, le arrojó un vaso a la cara. El trabajador soltó un puñetazo.