Un hombre de 81 años murió este miércoles en el hospital privado Cosaga de Ourense tras comer setas tóxicas que él mismo y su mujer habían recogido en el monte. El matrimonio tiene su domicilio habitual en Vigo, pero pasan largos períodos en el pueblo de Redemuíños, Quintela de Leirado, donde tienen su segunda residencia.

Ambos se indispusieron el domingo, tras ingerir las setas, e ingresaron en el centro sanitario. El hombre, que supuestamente comió mayor cantidad, empeoró y falleció el miércoles, pero su mujer ha sobrevivido. De hecho, está ya fuera de peligro, aunque continúa hospitalizada.

El funeral se celebró este jueves en esta parroquia ourensana, de donde es originaria la mujer y reside buena parte de su familia.

El hecho ha causado un importante impacto entre los vecinos de este municipio, donde ambos eran conocidos, ya que solían pasar en la casa de Redemuíños temporadas de dos a cuatro meses, desde que el hombre, Guardia Civil retirado, se jubiló. Precisamente, una de sus aficiones en esta época era salir a recoger setas. El alcalde de Quintela de Leirado, José Antonio Pérez Cortés, lamenta lo ocurrido y no se explica qué pudo ocurrir ya que ambos tenían cierta experiencia en la recogida de este producto.