Ourense no para de contar muertos. Y es que ayer otras cinco personas fallecieron con o por coronavirus y todas ellas relacionadas con centros geriátricos de la provincia. En concreto, murieron tres mujeres de 99, 95 y 92 años en la Residencia Os Gozos, otra mujer del geriátrico Val de Monterrei de Verín y un hombre de 87 del centro Nuestra Señora dos Anxos de Ribadavia, este último en el hospital ourensano. El área sanitaria contabilizó cinco de las 13 muertos que se produjeron en Galicia. Una tónica que fue y es constante durante todo el mes de octubre que se convirtió, ya en la segunda semana, como el segundo mes más letal de la pandemia y que sigue aumentando sus estadísticas.
La segunda ola tiene en octubre su abril particular. Durante el mes de abril, fallecieron 98 personas y en este mes van 81 personas que perdieron la vida por culpa del Covid-19. El guarismo de los decesos identifica que los grandes damnificados y las personas más vulnerables son los internos y usuarios de los geriátricos. De las 81 personas que murieron en el mes de octubre, 49 eran procedentes de geriátricos ourensanos.
Desagregando esos 49 fallecimientos, la residencia de Os Gozos contabiliza en esta segunda ola 37 decesos en solamente un mes. Un porcentaje muy elevado ya que los usuarios de Os Gozos son personas muy dependientes y, en algunos casos, con gran afectación en su salud. El geriátrico de Pereiro de Aguiar es el que más muertos contabiliza de toda la Comunidad de Galicia, junto a DomusVi Santiago con 39 decesos.
El segundo más afectado en el mes de octubre es el Val de Monterrei de Verín que ya suma ocho muertes. Otro de los afectados es el de Nuestra Señora de Lobeira con tres fallecimientos y por último, está el centro Nuestra Señora dos Anxos que ayer registraba su primer muerto en esta segunda ola. Datos que estremecen las estadísticas y a una sociedad que ve que los abuelos y abuelas se marchan si poder decir adiós y sin el aliento de una última palabra.
Política Social busca personal para Os Miragres
La Jefatura Territorial de Política Social de Ourense emitió un anuncio para buscar técnicos en cuidados de auxiliares de enfermería o equivalente para dotar de personal a la Residencia de Os Miragres. El plazo acabó ayer y entre los requisitos se pedía un mínimo de titulación del idioma gallego (Celga 4) y documentación sobre los contratos en la empresa privada en los últimos cinco años o en la Xunta durante el mismo periodo. La situación del geriátrico en la actualidad es que 76 residentes han dado positivo y se encuentran con los controles pertinentes para controlar la pandemia y 34 trabajadores dieron también positivo y están guardando la cuarentena preventiva. Además, ayer los trabajadores se sometieron de nuevo a un cribado para aquellos que dieron negativo repitan la prueba para cerciorarse de que no están incubando el virus y puedan seguir prestando los servicios en el centro. El regidor del municipio, Xosé Carlos Valcárcel, advierte que “hay que revisar todos los protocolos no pueden pasar estas cosas a estas alturas. Se cumplen los protocolos y pasa esto, la Xunta debe revisar los protocolos para que no vuelva a ocurrir y dar seguridad y prioridad a estos centros y residencias”.
Siete concellos ourensanos en nivel de alerta 3
El Covid-19 tiene una tendencia a la estabilización, pero sigue preocupando a las autoridades sanitarias que se reunirán hoy para dirimir si levantan las restricciones en la capital y en Barbadás o las amplían en la comarca de O Carballiño, con San Cristovo de Cea con una tendencia al alza. Previsiblemente, seguirán las restricciones ante un puente que puede generar un mayor número de movilidad hacia concellos limítrofes o lugares de nacimiento en la provincia para visitar a los familiares difuntos.
El mapa del coronavirus, elaborado por Sanidade, no difiere mucho del de las últimas semanas. En rojo continúan siete concellos, de los que sale O Barco y entra Viana do Bolo, provocado por el brote de la Residencia de mayores del municipio vianés donde se registran 24 positivos. Ourense, Barbadás, O Carballiño, Ribadavia, Verín y Xinzo, y ahora Viana do Bolo, están en alerta máxima ante la propagación del virus.
Además de ellos, en el segundo escalón se encuentran los concellos de Monterrei y Allariz donde la incidencia en los últimos siete días es preocupante. En nivel 1 de alerta y de color amarillo se sitúan San Cibrao das Viñas y Taboadela, además de O Barco que baja dos grados su nivel.
El mapa de la provincia deja nueve concellos con restricciones y una tendencia a la estabilización de la detección de casos que todavía genera preocupación, pero no extrema, ante las autoridades sanitarias que se centran más en el control de ciudades como Vigo, Santiago o A Coruña en donde la situación epidemiológica vuelve a incrementarse y donde están los principales focos de contagios de toda Galicia.
