La situación epidemiológica no cambia en la provincia de Ourense. Desde septiembre que se disparó la “bomba vírica”, la provincia mantiene restricciones y rebaja la propagación del virus, pero no a niveles adecuados para quitar las restricciones impuestas por la Xunta de Galicia en las diferentes comarcas.

La curva epidemiológica del área sanitaria de Ourense alivia su pendiente y ya se iguala a la de las demás áreas sanitarias que empiezan a ver como la propagación va a más. El subcomité clínico de la Consellería de Sanidad acordó mantener las restricciones impuestas en las comarcas de Ourense, Verín, O Carballiño y Valdeorras, sin imponer nuevas limitaciones. Todo queda como estaba, al menos, hasta el próximo viernes cuando se vuelvan a reunir los expertos del subcomité clínico. El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, defendió el mantenimiento de las medidas en la provincia con la especificación de que “en la capital seguirán unos días más”. En concreto, en la capital ourensana se mantiene en los 134 a 7 días y en los 291 a 14 días. Una cifra por debajo de la registrada a principios de octubre cuando superaba los 400.

Un alivio en la detección de los casos que tiene que ver con la disminución de la propagación del virus que destacan las autoridades sanitarias que viene propiciado por el confinamiento perimetral de Ourense y Barbadás, así como las diferentes medidas de ámbito social. A ojos de los expertos, las restricciones producen “efectos”, pero se mantiene la estabilización de los casos diarios, por lo que es necesario mantener las medidas.

A pesar del esfuerzo de la hostelería verinense y del confinamiento perimetral decretado por la Xunta entre el municipio de Verín, Oímbra y Vilardevós, la tendencia en dicha comarca “no responde a las medidas y hay una estabilización de crecimiento”. Esas son las palabras de la Directora Xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, al radiografiar la incidencia del virus en la provincia. Los casos continúan al alza en la comarca verinense y concentra la preocupación de las autoridades sanitarias.

La zona con las mayores restricciones de España tiene una tendencia decreciente según los datos facilitados por la Consellería de Sanidade. La comarca O Carballiño pasa de los 107 casos por 100.000 habitantes en los últimos 7 días a los 98 durante esta última semana. Además la incidencia de los últimos 14 días también disminuye pasando de los 221 a los 204. El foco está puesto en O Carballiño donde el cese del sector del ocio se produjo hace escasamente una semana y en palabras de la Directora Xeral de Saúde Pública, “todavía es pronto para ver los efectos a grandes rasgos”.

A pesar de mantener las restricciones en toda la provincia, no hicieron mención al caso de San Cristovo de Cea que tiene una incidencia al alza en las últimas semanas y que tampoco tomaron ninguna medida al respecto.

En la jornada de ayer se notificaron los fallecimientos de la jornada del lunes que suman 4 nuevos muertos vinculados a residencias de mayores. Tres de ellos de la residencia Os Gozos, de Pereiro de Aguiar, que ya contabiliza 30 fallecimientos durante toda la pandemia y uno de Nuestra Señora do Viso de Lobeira, que suma tres muertos en la segunda ola de la pandemia.

El conselleiro de Sanidade advirtió que “ya es hora de tomarse en serio las restricciones impuestas”, para que la curva desciende y, consecuentemente, la incidencia también para frenar una curva que ya está en días críticos como calificaron las autoridades sanitarias.

Los fallecimientos en esta segunda ola de la pandemia ascienden a 92 personas desde el 8 de agosto que se registró la primera muerte con otro residente de Os Gozos de 77 años muerto en el hospital ourensano. Más de la mitad de las muertes de esta segunda ola estanán vinculadas a geriátricos con especial letalidad en el centro de Pereiro de Aguiar.

Aumentan los casos críticos y los contagios activos en la provincia

La lista de los centros de residencias de mayores afectados por coronavirus ya superan el 50% de la provincia de Ourense. En esta segunda ola, se contabilizan 29 geriátricos y dos centros de personas con discapacidad en los que el virus está presente en mayor o menor medida. 14 de los 31 centros de la provincia afectados en la segunda ola ya contuvieron el virus durante la primera parte de la pandemia. Una situación que viene provocada por la reanudación de las actividades laborales, educativas, económicas y sociales en las facetas personales de cada trabajador. Porque, el personal, es el canal de transmisión del virus, algunas veces por ser asintomáticos y otras por tardanza en pruebas, pero la mayoría de las residencias que se han vuelto a ver en la tesitura de combatir el virus iniciaron los contagios entre el personal de las residencias. A pesar de los cribados masivos de las autoridades sanitarias, la afectación en las residencias es menor en número de contagios, pero no en número de centros ya que durante la primera ola se vieron afectados más de 35 centros en la provincia. Fátima en O Barco, Val de Monterrei, Os Gozos, Os Miragres o Anxos de Ribadavia vuelven a estar entre las residencia más afectadas por el virus que no distingue entre primera parte y segunda parte y que invita a repensar los protocolos y la gestión de las pruebas realizadas a trabajadores y usuarios.

14 de los 31 geriátricos afectados en la segunda ola ya lucharon contra el Covid en primavera

La curva en la provincia de Ourense no hay quien la entienda. A pesar de todas las restricciones impuestas continúa dando noticias positivas una jornada como negativas otra. Ayer los casos diarios detectados pasaron de los 153 del lunes a los 75 de ayer. Una disminución de la mitad de los casos detectados que se instala en la estabilización que se venía produciendo en los últimos días.

Tras este registro y las pocas altas que se produjeron en total 38 los casos activos vuelven a subir en la provincia de Ourense a los 1.423 en la actualidad, dejando un acumulado de 6.104 personas que tuvieron o están teniendo la enfermedad, así como 4.418 que ya la han superado.

En el caso de la capital ourensana, los casos activos vuelven a disminuir después de dos días de aumento y se quedan en los 375, según informó el alcalde del Concello de Ourense, Pérez Jácome, en su perfil de Twitter.

La hospitalización aumenta ligeramente en todo el área sanitaria excepto en el comarcal de Verín donde se mantienen los ochos casos ingresados en planta. Así pues en el comarcal de O Barco se pasa de 3 casos hospitalizados a 5 y en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense se contabilizan tres ingresos más en planta hasta registrar 77. La Unidad de Cuidados Intensivos suma un nuevo caso crítico y ya son 15 las personas que están en estado grave por culpa del coronavirus. Es el dato más alto en la segunda ola de la pandemia y la preocupación crece por la capacidad asistencial que pueda tener el hospital ourensano, que según las autoridades sanitarias está “garantizada”. La incidencia del virus se mantiene en valores altos en la provincia que ya tiene 19 concellos con algún nivel de alerta, entre los que se mantienen Verín, O Barco, Ourense, Carballiño, Xinzo y Ribadavia en nivel rojo de alerta 3 por la alta incidencia epidemiológica.