La CIG ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Ourense en la que alerta de que en la delegación territorial de la Axencia Tributaria de Galicia (Atriga) en Ourense “no se están tomando medidas preventivas para evitar contagios entre el personal y los personas usuarias”.

Este centro, indica el sindicato, se encuentra en el entresuelo de un edificio de la calle Progreso, en un inmueble con poca altura y poco espacio físico, “lo que dificulta que se pueda mantener la distancia de seguridad recomendada, ya que además del público que se atiende trabajan alrededor de 50 personas”. Señala la CIG que es difícil guardar las distancias tanto dentro como en los accesos, “y aunque se colocaron mamparas entre puestos los espacios de circulación son reducidos”. La ventilación, incide, “tampoco garanzia la renovación del aire para evitar contagios por aerosoles”. Denuncian que el personal no ha recibido mascarillas de protección.