El ex alcalde nacionalista de Castrelo de Miño, Esteban Suárez, asegura que no hay irregularidades en el transporte público municipal como denuncia el PP. Dice fue debatido, acordado y aprobado en pleno de octubre de 2011, y “no contó con ningún voto en contra de la oposición”.

Este acuerdo se sometió a exposición pública “sin que se presentara ninguna reclamación”, tiene la autorización de Transportes de la Xunta, y en 9 años “nunca” hubo ninguna reclamación por parte de nadie ni percances, y su eliminación “pone en riego las distintas certificaciones estatales e internacionales” con las que cuenta este ayuntamiento. Apunta que la única ilegalidad que puede haber es que el nuevo alcalde decidió prestar el servicio “con un conductor novel, con L incluida”, realizando el servicio en un microbús de 9 plazas.