El Centro de Coordinación (CECOR) volvió a reunirse ayer en la Subdelegación del Gobierno de Ourense para abordar la medidas coordinadas de actuación ante el cierre perimetral de O Carballiño, Boborás y O Irixo que entró en vigor este jueves.

Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como la Policía Local del ayuntamiento de carballiñés trabajarán de forma conjunta en el refuerzo de la vigilancia para controlar que se cumplan las limitaciones de movilidad que ya se aplican desde hace una semana en Ourense y Barbadás, también en este territorio, donde solo se permiten las entradas y salidas por motivos laborales, educativos o sanitarios.

Los operativos tendrán en cuenta tanto en vías principales como secundarias y se llevarán a cabo de manera coordinada entre efectivos de la Guardia Civil, Policía Autonómica y Policía Local de O Carballiño.

El subdelegado del Gobierno, Emilio González Afonso, recuerda que estos operativos no merman el resto de servicios que prestan las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.