La plaza de abastos de As Burgas podrá retomar el pulso normal de las obras. Según confirma el Concello, después del conato de incendio que obligó a desalojar el pasado 18 de julio, a los okupas que se habían asentado meses atrás en los puestos exteriores en ruinas del mercado, estos no han regresado, pese a que alguno de ellos se mantenía en esa situación de insalubridad da alegando que no tenían donde vivir y a la espera de un lugar donde poder ralojarse. Por ahora no se procederá a la demolición de esos puestos, mientras no culmine el proceso abierto por el Concello por vía judicial y todos los trámites administrativos en marcha. Pero la obra podrá retomar su pulso normal, que se había visto ralentizado dado que tanto las labores de apuntalamiento del edificio civil como ciertas detonaciones se retrasaban para no dañar a los okupas.