El mismo día que se sentaban a negociar las dos partes en discordia en la lucha contra el ruido en el casco viejo, caía otro más de los locales ilegales que funcionan en la zona de ocio de la ciudad y que en muchos casos llevan tiempo funcionando como pubs cuando cuentan en realidad con licencia de café-bar.

En la mañana de ayer, la Policía Local procedió al precinto del pub La Botica por ejercer actividad de café-bar especial sin licencia de actividad ni acto previo comunicado.

Una vez desestimados tanto los alegatos a la providencia de la Concejalía de Urbanismo como el recurso de reposición presentado por el titular, se ordenó de forma inmediata el precintado del local, que está ubicado en la Plaza del Corregidor número 4. Así, y por orden de la Concejalía de Urbanismo, la Policía Local procedió al precintado del mismo. La concejal, Sonia Ogando, recordó al respecto que "no consentiremos que se incumpla la ley", declaró.

Son ya cuatro los establecimientos de este tipo que han seguido el mismo camino, tras desbloquear todo el proceso abierto tras las denuncias vecinales, que demostraron que estos establecimientos gozaban de todos los privilegios de horario de cierre a altas horas, o música ambiente, que solo están al alcance de los establecimientos (muy pocos en el casco viejo) que tienen licencia para pubs y no para un café-bar convencional.