Luis Benjamín González Rodríguez, de 60 años, era un conocido abogado de Lalín (Pontevedra) y un pescador experimentado, amante sobre todo de la modalidad de pesca sin muerte. El domingo, muy temprano, acudió a Ourense para practicar ese deporte en el río Miño. No regresó y la familia, preocupada, denunció su desaparición al llegar la noche. Solía aparcar en una zona próxima, en un área de descanso y la costumbre era que volviera a comer a casa. Los peores presagios se cumplieron a primera hora del lunes. El cuerpo sin vida del letrado fue localizado poco antes de las siete de la mañana, cerca de la margen izquierda del Miño, a la altura de la nueva depuradora de Reza. La Policía Nacional descarta la violencia entre las posibles causas de este fallecimiento. La autopsia forense, que tuvo lugar ayer en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) tras el levantamiento al que asistió la juez, determinará las circunstancias de la muerte.

Según informa la delegación de Faro de Vigo en Deza, el fallecido era muy aficionado a la pesca, uno de los deportistas más reputados de la comarca y una persona muy conocida en la zona, tanto por el desempeño de su profesión como por la práctica deportiva con la que pasaba sus ratos de ocio. Nacido en el año 1960, estaba casado y tenía dos hijos. Su padre había sido letrado en la villa y su madre, Elsa Rodríguez, fue durante muchos años profesora en el colegio Sagrado Corazón de la capital dezana. Entre sus hermanos, todos ellos varones, es muy conocido el funcionario del Concello de Lalín y también abogado Salvador González.

El operativo de emergencias

Policía Nacional, Policía Local, profesionales sanitarios y bomberos participaron en el operativo de emergencias. Estos últimos recibieron a las 2 de la madrugada del domingo al lunes una llamada de la Policía que informaba de la desaparición del hombre tras haber ido a pescar. Los bomberos no pueden rastrear el Miño de noche. Nada más amanecer acudieron al río. A las 6.55 horas se localizó el cadáver en Pozas de Maimón, a la altura de la nueva depuradora. Avisaron a la Policía Judicial y, en su presencia, rescataron el cadáver, que estaba cerca de la orilla en una zona poco profunda. Tras la autorización al levantamiento del cadáver, operarios del servicio forense trabajaron el cuerpo al CHUO para la autopsia.