La imagen no deja lugar a dudas. El ocio nocturno ha vuelto, pero no adaptado a las circunstancias de la crisis sanitaria mundial. En el cóctel de la jarana nocturna, se juntan varios factores que provocan la concentración de gente en la zona de los Vinos y la reanudación de botellones a la puertas del barrio San Francisco o en As Lagoas.

Lo primero la falta de responsabilidad de la sociedad que se acerca hasta la Plaza del Corregidor sin mascarillas de protección y sin la obligada distancia social. Un vecino de la Plaza de O Corregidor arguye que "primero aplaudimos a los sanitarios y después le damos este ejemplo, les debería caer la cara de vergüenza a la gente que sale a tomar algo sin respetar las normas".

A la falta de responsabilidad se la suma la crisis de un sector que ha perdido mucho y quiere recuperar el tiempo perdido. "Algunos de los establecimientos abren sin licencia de pub hasta altas horas o no respetan el aforo permitido, no hay nada más que ver las imágenes. La noche ha vuelto a ser como antes, como una noche normal, y si a eso le sumas el alcohol el no respeto a las normas se multiplica". Mañana se abrirán las discotecas y la previsión es que "la noche" vaya a peor, con más afluencia, menos separación entre personas y sin la mascarilla de protección. ¿Confinamiento de nuevo? ¿Un rebrote en Ourense? Las posibilidades aumentan cuando se ven imágenes como las capturadas este fin de semana en la Plaza del Corregidor.