Quieren pasar página después de meses confinados en sus casas. No quieren dar nombres ni hacerse fotografías para no aumentar las huellas de un virus que les privó de libertad y del que se acuerda todos los días. Dos mujeres y un hombre relatan su estado después de superar el virus, tras estar 40, 61 y hasta 79 días con coronavirus.
Sonia - nombre ficticio- estuvo más de 60 días guardando las respectivas medidas de seguridad en su casa. "Fue un suplicio no poder abrazar a mis hijos y también estar en el mismo recinto con mi marido sin una muestra de cariño. Ahora ya puedo salir, pero la verdad que el coronavirus deja secuelas. No es como una gripe que estás mal después unos días y ya. Persiste el cansancio en determinados días. Parece que te levantas y no tienes ganas de nada". Es uno de los testimonios de una persona que ya está curada, pero que todavía tiene secuelas. "No sé por qué, la verdad, sé que hay a gente que se le pasó sin más, que no tiene cansancio y que tampoco tiene ningún tipo de secuela o que arrastra cansancio, pero a mí me tocó. A ver si se marcha pronto, porque te merma mentalmente".
Otra mujer, Bibiana -nombre ficticio- admite que "mi resultado dice que soy negativo pero siento que el virus todavía tiene algo que decir en mi cuerpo. Hay días que me despierto con febrícula y nada de cansancio, y otros días cansancio y sin febrícula. Los días que estoy completamente bien son los menos y la verdad, que seguir así después de estar con coronavirus 40 días es fastidiado. No solo por ti, si no también por tu familia y tus conocidos. Ves a la demás gente haciendo vida en la nueva normalidad y una misma sin tener fuerza para casi nada, no es una situación agradable".
David -nombre ficticio- también está cansado de su realidad. No solo por el virus que le ha tocado vivir si no por la televisión o las noticias. "Es algo que no logras olvidar, es decir, ya no son solo las secuelas que puedas tener o los efectos secundarios de estar tantos días contagiado si no que es una matraca que todos los días se repite continuamente en los medios de comunicación y también entre la sociedad, no te voy a engañar. El virus centra los temas de conversación y las relaciones sociales".
Su caso llegó casi a los 80 días con coronavirus y ahora admite "haberlo pasado, aunque a veces me levanto como que no puedo con el cuerpo como si corriera una maratón siendo un principiante".
Son tres casos de los 2.012 que se registran en la provincia que sienten que, a pesar de haber superado la enfermedad, el virus le acompaña durante todos los días. David añade que "y no es que no puedas trabajar porque tienes que sacar fuerzas de donde sea, porque el panorama no está para quejarse, pero que la gente no piense que se pasa y ya...".
En sus respectivos casos, el Covid-19 se resistió a abandonar su organismo y ahora en su "nueva normalidad" todavía sienten esos viejos síntomas que le recuerda a la mayor pandemia del siglo.
Sonia admite que "yo, al menos, quiero que esta sensación desaparezca ya porque no me permite ser yo mismo. Yo soy alegre y activa y hay días que no me reconozco".
Sonia, Bibiana y David -nombre ficticios- narran sus vida diaria con la esperanza de que esas sensaciones desaparezcan de una vez. Son las secuelas que dejó el virus en algunos de los contagiados. Las huellas de un recuerdo que se mantiene activo, pese a arrojar un resultado negativo. Otros ya son ellos mismos, pero ellos todavía siguen por recuperarse y estar "al cien por cien".
