Los centros de discapacidad y los geriátricos, dependientes de la dirección y gestión de la Fundación San Rosendo, han decidido postergar las visitas para la próxima semana después de elaborar un "plan de reactivación" de los centros, encomendado por las autoridades competentes.

La posibilidad de las visitas está abierta para aquellos centros que quieran y cumplan con la normativa en prevención de contagios contra el coronavirus, sin embargo la Fundación San Rosendo ha decidido priorizar la relativa normalidad entre los residentes antes de dar un paso más hacia la apertura de sus instalaciones: "En nuestro plan está pensado que durante esta semana del 25 al 31 de mayo, los residentes de los centros, tanto mayores como discapacitados, puedan recuperar su normalidad en los centros y en la medida de lo posible realizar actividades o salir al patio".

Este primer paso será el predecesor a las visitas: "Esperamos que a partir del lunes 1 de junio podamos abrir las instalaciones para realizar visitas, pero siempre analizando todos los escenarios posibles y teniendo en cuenta todas las posibles actuaciones a realizar".

Cita previa y control

La Fundación San Rosendo adapta las medidas impuestas por las autoridades realizando una encuesta telefónica a las personas autorizadas que figuren como tutores o representantes en las fichas de cada centro -si no tienen esta condición los familiares no podrán hacer visitas- y llevará a cabo un control de los accesos donde se tendrá que firmar el cuestionario respondido por teléfono además de cumplir los requisitos establecidos: "Llevaremos una serie de medidas de vigilancia, de prevención y de control, porque así nos lo exigen y así está estipulado". Fuentes de la Fundación explican que "entendemos a los familiares que quieren abrazar a sus seres queridos, pero tienen que estar concienciados que estas medidas tendrán un retorno en un futuro si somos conscientes y si todos los familiares y residentes las cumplen".