El campus universitario de Ourense participa en el estudio Predico que permitirá anticipar la expansión e incidencia del Covid-19. El proyecto, que acaba de recibir financiación por parte del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), y permitirá crear un modelo de predicción dinámica sobre escenarios de afectación del virus a corto y medio plazo. El profesor de la Escuela de Ingeniería Aeronáutica de Ourense, Iván Area, es uno de los investigadores implicados en el estudio, que integra a expertos de las universidades de Vigo, Santiago de Compostela y Aveiro, así como del Centro Nacional de Biotecnología (CSIC), siendo su coordinador el catedrático de Electromagnetismo de la USC, Jorge Mira.
"Este proyecto es un reconocimiento del trabajo hecho durante los peores días de la pandemia y una demostración de que es perfectamente posible el trabajo entre compañeros de distintas administraciones, de distintas áreas de conocimiento y de distintos países", indica Area.
Lo que se pretende con esta investigación, explica Jorge Mira, "es liquidar uno de los principales problemas con los que se están enfrentando los modelo conocidos: la fiabilidad de los datos disponibles, tanto por dificultades en los mecanismos de detección, como por una probable abundancia de casos asintomáticos".
Así, el equipo de investigadores aspira a adivinar el número de unidades de cuidados intensivos (UCI) necesarias para evitar la saturación mediante la estimación de personas infectadas. Asimismo, el modelo de predicción incorpora agentes causales que no incluyen los modelos clásicos, y detectará el impacto social de las medidas adoptadas por las autoridades y valorará los mecanismos de control a través de las redes sociales.
El trabajo se desarrollará en tres frentes a lo largo de los próximos seis meses con modelos que proporcionan sistemas de ecuaciones diferenciales, con el llamado Modelado Dinámico Empírico, que prescinde de ecuaciones, y a través de un análisis de la red social española, que retroalimentará las dos vías anteriores. En el estudio, explican, se modelarán los infectados asintomáticos y los llamados superpropagadores. A través de la llamada teoría del control óptimo se buscarán las intervenciones idóneas que permitan la reducción de la propagación.
