Entre las numerosas y polémicas intervenciones realizadas por el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, durante el pleno municipal del pasado 6 de marzo, las referidas al Plan Xeral de Ordenación Municipal y a supuestas recalificaciones atribuidas por el regidor a la exconcejala socialista, Áurea Soto y el PSOE han trascendido la crítica política y la viralidad en redes sociales.
La exedil y responsable del urbanismo en la ciudad entre 2007 y 2015 no ha querido dejar pasar esas acusaciones y ha optado por la vía judicial. Ayer mismo presentó ante el juzgado de guardia de Ourense un escrito de 14 páginas en el que afirma que lo dicho por Jácome no solo es "falso", sino que "lesiona mi dignidad y menoscaba mi fama personal y la profesional, y atenta contra mi propia estima".
El documento, que abre la vía de la conciliación, reproduce las afirmaciones que el alcalde dirigió a la edil socialista Natalia González en el transcurso del pleno. En ellas responsabiliza al PSOE del aumento de la edificabilidad en dos torres previstas en A Ponte, junte al Puente Milenio. Ante la protesta de la edil, que negó tal realidad alegando que dichas modificaciones se realizaron durante el gobierno previo del PP, Jácome saltó: "Estás totalmente equivocada. Fue Áurea Soto la que duplicó la edificabilidad y la que le dio a mayores ocho plantas al lado de 19. ¿Qué dices? ¿Por qué mientes? Si nosotros lo denunciamos en la justicia, y la finca pasó de valer un millón de euros a cinco al día siguiente". Las "grandes recalificaciones" del plan, continuó Jácome, "son del PSOE, que es quien hizo el 99%".
El pleno del Concello de Ourense que se ha hecho viral. // Auria TV
Tras indicar que Democracia Ourensana no está "de adorno" en el gobierno local indicó que "claro que vamos a tocar el PXOM" y remató con el viral "¿o vamos a permitir que sea el PXOM de Áurea Soto el 100%? ¡Tú flipas nena, flipas!", dirigiéndose de este modo y en todo momento a la concejala socialista Natalia González.
El escrito presentado por Áurea Soto es el paso previo a un posible procedimiento por delito de injurias que, antes de iniciarse abre una vía de conciliación que da la opción al alcalde Jácome de retractarse, lo cual podría evitar un procedimiento por la vía civil, penal, o ambas, cuestión en todo caso, que corresponde decidir Áurea Soto.
En su escrito, la exconcejala aporta documentación relativa al PXOM que desmontaría las afirmaciones de Jácome y que, además, incide la exedila, demuestran que el ahora regidor hizo tales declaraciones "con conocimiento de su falsedad y temerario desprecio hacia la verdad", ya que durante aquel período era concejal de la oposición y participó de todos los debates que suscitó la anulación del plan.
Recuerda que antes del PXOM de 2003 el terreno en cuestión preveía dos edificios de cuatro plantas. La recalificación del nuevo plan otorgaba 19 plantas para cada una de las torres, quintuplicando y cuadriplicando, respectivamente, la superficie edificable. Este PXOM, aprobado durante el gobierno de Manuel Cabezas (PP), fue anulado por nueve sentencias ratificadas por el Tribunal Supremo en marzo de 2011 porque el documento aprobado no se correspondía con el expuesto al público. En el caso de las torres, recuerda Soto, en el documento expuesto al público figuraban dos torres de 12 y 16 plantas.
También incide la exedil en que tras la anulación, la Xunta, con Feijóo al frente, aprobó en 2011 una ordenación urbanística provisional que autorizaba las torres del plan de 2003. Por lo tanto, la Xunta "por segunda vez vuelve a recalificar" dicho ámbito permitiendo las 19 plantas.
El acto de conciliación promovido por Áurea Soto pide que se cite a Jácome para que se retracte y admita que en dicha recalificación nada tuvieron que ver ni ella ni el PSOE, y que así lo haga público en el próximo pleno municipal "reconociendo la falsedad de sus imputaciones".
Críticas de la oposición
Por su parte, los tres grupos de la oposición, PSOE, Ciudadanos y BNG, calificaron ayer de "vergüenza" la actitud del alcalde en el último pleno y han reprochado al PP su respaldo. Asimismo, critican que cambie la fecha del próximo debate, previsto para el 3 de abril, de forma unilateral. Reprochan su "abuso de poder" y "actitud dictatorial".
