La Sociedad Galega de Historia Natural solicita las analíticas de las aguas de abastecimiento en la comarca de A Limia de los últimos cinco años. Y es que según la información facilitada hace un año por la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil los resultados de los 19 pozos que analiza muestran que la concentración media de nitratos aumentó globalmente un 39% entre 2014 y 2017 hasta los 16,3 miligramos/litro.

Asimismo, revela que la calidad es muy buena (<1 mg/l) solo en seis puntos (1/3 del total) y en todos los nitratos están aumentando ligeramente. Y, por ejemplo, en el punto MS015SUB la concentración se multiplicó por cuatro entre 2014 y 2015, habiendo dos muestras con la categoría de agua no potable e otras tres casi en el límite. Tan solo en el último mes el abastecimiento a Vilariño das Poldras, en Sandiás, se cortó dos veces por no ser potable.