Quince de los 27 concejales que conforman la nueva corporación municipal de Ourense tendrán dedicación exclusiva en el Concello. Diez dentro del grupo de gobierno de coalición DO-PP y cinco en la oposición. El PSOE, que fue la fuerza más votada y subió de tres concejales a nueve, tendrá tres dedicaciones sin competencias (tenía una y media) y Ciudadanos y BNG, que no estaban en el mandato anterior, una cada uno. En cuanto al personal de confianza, el grupo de gobierno tendrá 10 trabajadores eventuales y la oposición, cuatro.

El pleno de organización que aprobará este reparto, la asignación de personal eventual y las retribuciones se celebrará el próximo martes 2 de julio, a las 9.30 horas.

Como novedad respecto a la etapa ya cerrada se crea la figura del teniente alcalde único y se mantiene el mismo número de trabajadores eventuales (14), dejando la puerta abierta a posibles modificaciones. Los sueldos, confirmó el alcalde Gonzalo Pérez Jácome, se mantendrán congelados, por lo que él percibirá el mismo salario que su predecesor, Jesús Vázquez, en torno a los 68.000 euros según la última actualización. Jorge Pumar (PP), que ejerce como teniente alcalde, percibirá 58.000 euros anuales.

En cuanto a las retribuciones de los ediles con delegación, se mantienen los mismos sueldos (47.517 euros para los concejales con delegación y 34.654 para los que no tienen competencias asignadas). Tampoco sufrirán variaciones los sueldos del personal de confianza que en el pasado mandato fijaban tres importes diferentes: 38.000 euros el jefe de gabinete, 33.300 el asesor político y 21.400 el auxiliar.

En cambio, las asignaciones a partidos políticos con representación municipal se incrementan y pasan de 450 euros al mes por grupo municipal a 700, y de 450 por concejal a también 700 euros mensuales.

Aunque a fecha de ayer no se habían firmado los nombramientos del personal de confianza ni la delegación de competencias en el grupo de gobierno, la previsión del gasto anual en concepto de sueldos de concejales con dedicación, nóminas del personal de confianza y asignación por grupos políticos ronda los 1,2 millones de euros. A esto habrá que sumar las dietas por asistencia a plenos y juntas de área que perciben los ediles sin asignación y que también se mantienen congeladas.

La propuesta que se elevará al pleno de organización fue presentada ayer a los portavoces de los grupos políticos en una reunión celebrada en la Alcaldía a la que asistieron el regidor Pérez Jácome, el teniente de alcalde Jorge Pumar, y los portavoces Miguel Caride (DO), Flora Moure (PP), Rafael Rodríguez Villarino (PSOE), Pepe Araújo (Cs) y Luis Seara (BNG), además de los ediles de DO, Isabel Rebanales y Armando Ojea.

El reparto implica un incremento relevante de las dedicaciones exclusivas en relación al mandato anterior en el que el PP gobernaba en minoría con diez ediles de los que seis tenían dedicación, y la oposición, que sumaba 17 concejales, se repartía tres dedicaciones absolutas y una parcial. Pérez Jácome explicó al término de la reunión que el aumento en el grupo de gobierno tiene que ver, precisamente, con el paso de diez a catorce ediles. Insistió en que "hablar de sueldos nada más llegar es lo primero que hay que hacer porque si no sería ilegal", por lo que dijo, "espero no tener críticas por esto".

Si las recibió del resto de portavoces por el retraso en la delegación de competencias que, aseguró, se producirá hoy. Además, señala que "el Concello está funcionando, el trabajo en la Alcaldía es tremendo y estamos viendo las carencias en la estructura del Ayuntamiento". Tampoco aceptó las críticas la portavoz del PP, Flora Moure, que defiende un trabajo "coherente, tranquilo y en la mayor sintonía".

El portavoz socialista, Rafael Rodríguez Villarino augura que "no será un gobierno estable" por estar formado por "personas sin experiencia en gobierno y otras enviadas desde la Diputación que son las que están tomando la dirección del consistorio". Araújo, de Cs, ve a "un alcalde arrinconado, casi asustado, porque la realidad es distinta a lo que predicaba". Luis Seara, del BNG, censura la "improvisación" y critica la demora en la composición de gobierno.