Después de que el Concello de Ourense recibiese los resultados de un estudio pionero a nivel nacional para detectar los espacios urbanos de la ciudad que son percibidos como inseguros por las mujeres, ahora lo que toca es que el nuevo gobierno ponga en marcha las medidas necesarias, como señalan colectivos feministas.

El estudio, que contó con la participación de 55 representantes de entidades del tejido asociativo y de 16 mujeres residentes en Ourense, tiene como objetivo transformar estas zonas públicas en entornos igualitarios que permitan prevenir situaciones de riesgo. La iniciativa está enmarcada dentro del tercer Plan de Equidad del concello, quiere dar respuesta a estas situaciones y aboga por promover la igualdad en los espacios públicos.