Los incendios forestales no dan tregua en Ourense, que estrenó 2019 con fuego y sigue sumando hectáreas de monte quemado en pleno invierno.

Tras quedar extinguido el viernes un foco que arrasó 23 hectáreas en Cernado, Manzaneda, las llamas regresaron ayer a los montes de la provincia con dos nuevos focos en O Carballiño y A Mezquita que arrasaron entre ambos más de 80 hectáreas.

El primero de estos siniestros, declarado en la parroquia de O Carballiño y próximo a la localidad de Madarnás, permanecía activo a las 21.00 horas, con una superficie afectada estimada de 50 hectáreas; mientras que en el segundo, ubicado en la parroquia de Castromil, en A Mezquita, los efectivos lograron extinguirlo pasadas las ocho de la tarde.

Este último incendio comenzó a las 14.50 horas y los efectivos del servicio de extinción lograron contralarlo en tres horas y extinguirlo poco después. Trabajaron tres agentes, cuatro brigadas, dos motobombas y dos helicópteros.

Según las estimaciones de la Consellería de Medio Rural, la superficie afectada es de 27,7 hectáreas, de las cuales 3,9 son de monte arbolado y el resto de monte raso.

En el caso de O Carballiño, las llamas comenzaron a las cuatro de la tarde en la parroquia homónima y afectaban al cierre de la edición a unas 50 hectáreas. En este fuego actuaron tres agentes, cinco brigadas, tres motobombas y un helicóptero.