El edificio Politécnico de Ourense abrió sus puertas en sábado para recibir a sesenta personas ajenas a la comunidad universitaria interesadas en conocer la investigación de excelencia que se realiza puertas adentro del campus universitario. Desde la obtención de productos para la industria alimentaria y farmacéutica a partir de biomasa de origen vegetal o marina al desarrollo de la inteligencia artificial con aplicaciones en el ámbito sanitario. Los participantes, muchos de ellos niños, tuvieron la oportunidad de acercarse un poco más al trabajo científico que se realiza en su propia ciudad y los investigadores pudieron mostrar que sus horas de laboratorio tienen aplicación en la vida real.

La iniciativa se enmarca en el programa de actividades de divulgación científica y tecnológica que desarrollan de forma conjunta los tres centros de investigación singular de la Universidad de Vigo: Centro de Investigación Mariña (CIM), centro de investigación en Tecnoloxías de Telecomunicación, (atlanTTic) y Centro de Investigacións Biomédicas (Cinbio). Los tres tienen sede en Vigo pero en este último, dos de los 13 grupos de investigación que lo conforman están ubicados en el campus de Ourense. Ambos, con el apoyo del grupo de Inmunología de Vigo, ofrecieron ayer una demostración abierta de sus líneas de investigación más potentes y sus aplicaciones prácticas.

La jornada estuvo dirigida por el catedrático Florentino Fernández Riverola, docente de la Escuela Superior de Ingeniería Informática de Ourense, ESEI, y subdirector del Cinbio, que hizo una presentación de este centro reconocido por la Xunta como centro de investigación singular desde 2016.

Tras realizar un repaso a las diferentes líneas de trabajo que se desarrollan en el Cinbio, la jornada se centró en los dos grupos con sede en el campus de Ourense: el SING, Sistemas Informáticos de Nueva Generación, perteneciente a la ESEI, y el EQ-2, de Ingeniería Química, integrado en la Facultad de Ciencias.

"La actividad estaba abierta a la comunidad universitaria y al público externo pero todos los que se inscribieron eran personas ajenas a la universidad", explica Florentino Fernández, que se mostró "gratamente sorprendido" por el interés que la jornada divulgativa despertó en los participantes.

Aunque no estaba dirigida específicamente a los niños, la cita congregó a muchas familias y las demostraciones científicas despertaron la curiosidad de los más pequeños. "Existe poco conocimiento en la sociedad de la investigación que hacemos y por eso es importante la divulgación", apunta Fernández Riverola. "Los niños tienen una curiosidad innata y cuando ven ciencia aplicada hacen preguntas con mucho sentido; sorprende lo bien que preguntan", añade. Considera interesante fomentar este interés por la ciencia también en la escuela para mantener viva esa curiosidad.

Ayer, 60 personas tuvieron el privilegio de conocer de cerca la investigación de excelencia que realizan los dos grupos ourensanos del Cinbio en materia de bioinformática y productos bioactivos.

El grupo SING, liderado por Florentino Fernández Riverola, impartió una charla sobre inteligencia artificial en el ámbito sanitario, que es su principal línea de investigación. "Somos nueve profesores doctores con dedicación a tiempo completo y la bioinformática es donde somos más potentes, trabajamos con algoritmos de inteligencia artificial y análisis de datos masivos, dando soporte a distintas investigaciones bio", explica el catedrático. El grupo desarrolla aplicaciones para el ámbito sanitario que, como matiza el investigador, "llega a los hospitales". Un ejemplo es el proyecto Polydeep, desarrollado en colaboración con investigadores del CHUO, que utiliza la inteligencia artificial para detectar el cáncer de colon.

El segundo grupo, EQ-2, centrado en la biomasa y el desarrollo sostenible expuso sus líneas de investigación sobre prebióticos y antioxidantes bajo el título "Biomoléculas activas en tu día a día". Los niños disfrutaron con esta actividad en la que pudieron tocar el aparataje utilizado en laboratorio y jugar así a ser científicos.

El grupo vigués de Inmunología ofreció una charla sobre las nociones básicas para una dieta saludable que incluyó la elaboración de un desayuno.