El interruptor del alumbrado artístico encendió ayer la Navidad en Ourense. Desde las siete de la tarde, la ciudadanía concentrada en la Praza Maior esperaba expectante a que el árbol de luces situado en el centro comenzase a brillar.

Los encargados de hacerlo fueron Rubén y Aldara, dos niños de la asociación Down Ourense. Acompañados por el alcalde de la ciudad, Jesús Vázquez, pulsaron uno de los momentos más deseados por los amantes de las fiestas navideñas, la ambientación en las calles que inevitablemente despierta el espíritu festivo y, lo más importante para el comercio local, anima las compras y el gasto en los servicios de hostelería y restauración.

La empresa Electro Miño es la encargada de la instalación del alumbrado navideño que desde ayer luce ya en las calles del centro urbano, en los principales puntos turísticos, accesos y rotondas, así como en algunos barrios,a los que este año se ha extendido la decoración led.

En total, se han instalado 957.271 bombillas de bajo consumo distribuidas en 264 arcos y 150 motivos. La empresa anunció que Ourense es la primera ciudad de Galicia en la que han estrenado un nuevo e innovador sistema de iluminación artística denominado Fotópica, que es la percepción visual que se produce con niveles de iluminación diurnos. Según explica la empresa instaladora, esta percepción se consigue a través de figuras ancladas en los diferentes arcos ornamentales que, tanto con la luz del sol como la artificial, proporciona un efecto 3D de los detalles grabados, diferentes según la posición desde la que se mire. Llamó la atención de los viandantes la lluvia de luces en las calles Paseo y Santo Domingo, pero la reina de los selfies este año es la gran bola de luz situada frente a la Subdelegación del Gobierno en la que es posible meterse dentro.

La fiesta continúa y esta tarde, a las 19.30 horas, tendrá lugar en la zona termal de As Burgas la inauguración oficial de su alumbrado artístico, con concierto de la ourensana Marem Ladson.