Fue un incendio provocado por un compuesto acelerante -gasolina no, en principio- que dejó en estado inhabitable una vivienda en la que residían una mujer y su hija adolescente en la calle Río Tuño, en el barrio ourensano de O Vinteún. El suceso, que por fortuna se saldó sin heridos porque las inquilinas no se encontraban en la vivienda, sacó a la luz un caso de violencia machista. Horas después del incendio, registrado poco antes de las 9 de la mañana, era detenido el exmarido, a quien la víctima acusó ayer de amenazas y malos tratos físicos y morales durante la relación. Llevaban tres meses sin convivir, separados.

La Policía ve al individuo como el principal sospechoso del fuego intencionado en la vivienda, pero a falta de pruebas de laboratorio, solo existen evidencias por ahora de un presunto delito de violencia de género. En función de las pruebas, podría acabar investigado por tentativa homicida. El sospechoso tiene 47 años y fue conducido a los calabozos a las 19 horas de ayer, tras ser detenido por agentes del Servicio de Atención a la Familia (SAF) de la Comisaría Provincial. Está previsto que hoy sea puesto a disposición del juez de guardia.

Entraron con llave o "resbalón"

Los bomberos y la Policía Local fueron los primeros en intervenir en el piso incendiado. Un particular llamó alertando de que vio salir humo de una vivienda y que no sabía si había gente en su interior, por lo que también dieron aviso al 061. Los bomberos, ocho en total, extinguieron las llamas y localizaron al menos cinco focos de inicio en el interior del domicilio. Las llamas afectaron al pasillo y después, por humo y fuego, al resto de la vivienda, inhabitable. El operativo duró una hora y 45 minutos.

Ante los indicios de que el suceso había sido deliberado, el parque dio aviso inmediato a la Comisaría de Policía Nacional. Se hicieron cargo de las pesquisas la Policía Científica y la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV).

Los agentes de la Científica realizaron una inspección ocular del domicilio, situado en un primer piso, y del que fue rescatado con vida un perro. Recogieron muestras del compuesto acelerante para que lo analice el laboratorio central de la Policía, en Madrid.

En el lugar del suceso se presentó la mujer, que vive con una de sus hijas, menor de edad, en régimen de alquiler en la vivienda. La madre denunció que en el pasado había sido víctima de su exmarido, con el que ya no convivía desde hace tres meses. Sospecha que él se coló en la vivienda y prendió fuego. La víctima relató a la Policía Nacional que esa mañana había abandonado el piso, sin llegar a cerrar con llave. La Comisaría de Ourense investiga si el sospechoso utilizó una llave para acceder al domicilio, o bien franqueó la entrada con el conocido como método del "resbalón", empleando útiles como una tarjeta o una radiografía.

El Concello realoja a ambas

La víctima no había presentado denuncias previas, tal y como confirmaron fuentes policiales. El Concello de Ourense ya ha iniciado los trámites para realojar a las dos ocupantes, madre e hija menor de edad. El gobierno local resaltó, asimismo, que el Centro de Información Municipal á Muller (CIMM) está trabajando en posibles "ayudas de emergencia social pertinentes así como la atención psicológica y social necesaria".