Los relojes de la víctima, pruebas de dos casos

El único juzgado de instrucción que no se vio afectado por robos de pruebas de causas, será el encargado de instruir el procedimiento contra J.M.R.I., el personal laboral de la Xunta detenido por la oleada de casos en el Pazo de Xustiza. Junto a joyas, teléfonos móviles, un portátil y los objetos que la Policía y el juzgado investigan sustrajo durante años, el trabajador del edificio se apoderó de los relojes de Tomás Milia. Su desaparición causó un gran malestar a la familia, que exigió respuestas a la justicia. Ahora, las piezas de bolsillo (valoradas en unos 10.000 euros) son la prueba de dos casos: del crimen de Milia y de la causa por robo continuado del extrabajador del juzgado.

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