Crisis económica y encontrar financiación para emprender parecen términos contradictorios, y habitualmente lo son. Pero lo cierto es que a pesar del vértigo y las dificultades siempre hay súper ideas que consiguen lo imposible, conseguir la confianza de algún inversor y echar a andar en un mundo de paro y desolación.

Quince de estos valientes, con súper ideas en el campo de la biotecnología, se dieron cita ayer convocados por la Lonja de Financiamento Bio en la Tecnópole. Allí, tuvieron la oportunidad de presentar sus proyectos a inversores públicos y privados. Ocho de ellos consiguieron "ser acelerados", o lo que es lo mismo hicieron su sueño realidad de poner en marcha lo que lleva ya meses ocupando sus horas y quitándoles el sueño.

La Xunta y Bioga son los organismos que se encuentran detrás de este Bio Investor Day, de la idea de crear espacios en los que los fondos de capital riesgo conozcan proyectos innovadores de primer nivel que precisan de un empujoncito para salir al mundo.

El propio gobierno, a través de los Fondos I2C es también uno de los socios que ofrece su capital a estas jóvenes empresas. Desde el ámbito público estuvo también presente el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial. Por la parte privada, el apoyo financiero se concentró en los fondos Inveready, One to One, Health Equity y Caixa Capital Risc.

Con confianza en sus propuestas pero también con nervios, los diferentes emprendedores presentaron sus ideas ante sus potenciales socios capitalistas. Entre los proyectos, una empresa que extrae del bagazo un remedio anti acné, otra que explota los beneficios cosméticos de las algas y un software que asiste a las farmacéuticas en la mejora de sus medicamentos.

Para animarles, y arrojar un poco de luz al oscuro túnel de la situación económica estaba Marta Dagá de Bialactis, una empresa de probióticos que consiguió financiación en esta Lonja el año pasado. Dagá habló a los futuros empresarios de su caso de éxito: "ilusión y dedicación son esenciales, el proyecto tiene que ser tu vida".

A la clausura acudió el Conselleiro de Economía, Francisco Conde que aseguró "que la conexión entre ideas y emprendimiento es la clave para el crecimiento de Galicia, y esa unión sólo es posible con el riesgo como puente. Lo verdaderamente arriesgado es no arriesgar".