El fuego regresó este lunes, por partida doble, a los montes de la Ribeira Sacra ourensana en el concello de Nogueira de Ramuin. Dos nuevos incendios arrasaron al menos 63 hectáreas -Medio Rural no facilitó datos de superficie del segundo- cerca de las poblaciones de Loureiro y Pombar, en la parroquia de Vilar de Cerreda, que ya habían sido golpeadas este mes, y otro foco por la tarde se aproximó a una vivienda en Santa Xusta, parroquia de Carballeira. Los incendios se ensañan este verano con un territorio incomparable que aglutina parajes de alto valor ambiental, como los Cañones del Sil -protegidos como Lugar de Interés Comunitario y Red Natura- con atractivos como el Catamarán del Sil, rutas de senderismo o el Parador Nacional de Santo Estevo, piezas de uno de los motores fundamentales del turismo de interior en la provincia de Ourense.

En lo que va de mes las llamas han malogrado en la zona más de 200 hectáreas según los partes oficiales de la consellería de Medio Rural. "Estamos un poco desbordados", reconocía ayer, tras el segundo incendio del día, el alcalde de Nogueira de Ramuin, César Parente (PP). "Este año está siendo trágico por los incendios, hay muy mala intención. La verdad es que se están ensañando con nosotros". Si bien el frente que más hectáreas devastó, unas 75 a mediados de mes, se inició supuestamente por el estallido de una línea eléctrica y sitió la aldea de Pombar. Mientras lo extinguían, de madrugada y por la mañana, otros tres focos presuntamente intencionados complicaban la extinción.

El mayor de los dos incendios de los registrados ayer empezó poco antes de la madrugada del domingo al lunes. Ardieron 15 hectáreas de monte arbolado, pinares fundamentalmente, y el resto de superficie rasa. A falta de medios aéreos se unieron en la lucha trece brigadas y siete motobombas. A las 19 horas la Xunta daba por extinguido este frente. El viento soplaba a favor minimizando el riesgo para la aldea de Loureiro. El fuego se quedó a 150 metros.

Poco después de las cinco, fuentes de extinción informaron del envío de 5 aviones, 2 helicópteros y un medio de coordinación a la parroquia de Carballeira, cerca de una casa en Santa Xusta. No ha trascendido la superficie quemada. La Xunta lo dio por controlado a la hora y media.