En marzo realizó un informe sin entrar a valorar la adecuación a la legalidad de los contratos presuntamente irregulares de José Luis Baltar, según el fiscal jefe de Ourense, y en octubre dejó la Diputación Provincial, poniendo fin a una etapa de más de una década al frente del órgano fiscalizador de la administración ourensana. José María Baños se marchó en octubre de 2010 para recalar como secretario en un pequeño ayuntamiento de la comunidad de Castilla La Mancha.

El alto funcionario que llegó a ser incluso presidente de Club Ourense Baloncesto (COB) realizó un informe de intervención el 24 de marzo de 2010 tras la petición del grupo provincial socialista para evaluar el encaje dentro de la regulación y las partidas disponibles para el pago de salarios y seguridad social del centenar de contratos impulsados por José Luis Baltar entre enero y marzo del año 2010, la remesa presuntamente irregular que será analizada por el magistrado de instrucción.

Dos meses más tarde, en mayo de 2010, el secretario de la Diputación, Francisco Cacharro, elaboró un extenso informe, hasta 4 meses más tarde que algunas altas, en el que avaló altas como urgentes y siempre según el criterio de necesidad que dependía de la "discrecionalidad" de Baltar. El fiscal jefe de Ourense, Florentino Delgado, considera en su querella que ambos informes, posteriores a los 8 decretos de puño y letra del exbarón imputado, "no se valoró o informó la adecuación de la tramitación de la contratación a la legalidad".