Un millar de "indignados" participaron en una movilización, desde la Praza Maior a la Subdelegación del Gobierno, para protestar contra el Pacto del Euro, "los recortes sociales y democráticos que comporta" y "la dictadura de los mercados", además de manifestarse contra la "oligarquía bancaria", la política y los que se lucran del "gran negocio llamado deuda pública". Y reclamaron una política fiscal justa, en defensa de lo público y de los bienes públicos.

Los manifestantes portaron pancartas y lanzaron consignas alusivas a la situación económica, como "Europa para o pobo, non para os mercados", "Non somos mercancía nas mans dos políticos e dos banqueiros" y "A crisis que a paguen eles". Lo más coreado durante el trayecto fue: "Le llaman democracia y no lo es" y "¡Manos arriba, esto es un rescate!". Participaron personas de todas las edades, con bastantes familias al completo, por lo que el promedio de edad rondó los treinta años.

Los manifestantes pusieron un cuidado especial en que no se mostraran símbolos de partidos políticos ni sindicatos, además de desmarcarse por completo de las actuaciones violentas que se registraron en otros puntos del Estado, por lo que la marcha transcurrió sin incidencias.

Esta es la primera manifestación que realizan de forma conjunta las dos organizaciones de "indignados" que hay en la ciudad: "Acampada Ourense" y "Democracia Real Xa". A partir de ahora se coordinarán para realizar charlas en los locales de las asociaciones de vecinos que hay en los barrios y de entidades culturales y recreativas. Los "indignados" de Ourense también se sumarán a la manifestación que se desarrollará a nivel mundial el día 15 de octubre.

De forma conjunta, reclaman la reforma del sistema electoral, la separación efectiva de poderes, la abolición de paraísos fiscales, la supresión de los privilegios de los políticos y una democracia más participativa.

Para lograr los avances sociales que persiguen, los "indignados" de Ourense remitirán una circular a todos los partidos políticos e invitarán a sus representantes a participar en una mesa redonda, para darle a conocer sus inquietudes y demandas.

Los "indignados" finalizaron la jornada con un concierto en la Praza Maior, lugar donde habían realizado la acampada, en torno a la celebración de las elecciones municipales del 22 de mayo. A medida que fue avanzando la noche, regresaron todos a sus casas.