El Juzgado de Primera Instancia de Ribadavia ha resuelto condenar a Xoán Pablo Lorenzo Fariña, como autor de una falta contra el orden público del artículo 633 del Código Penal, a la pena de cuatro días de localización permanente y una multa de 18 días con una cuota diaria de 5.00 euros. Se establece una responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas no satisfechas. Este vecino de Leiro fue denunciado por interrumpir reiteradamente el normal funcionamiento de una sesión plenaria en el Concello de Leiro.

El 29 de abril durante la celebración de un pleno Fariña, que asistía como público, hizo uso de la palabra sin estar facultado para ello. Ante este comportamiento el alcalde, Francisco José Fernández, le pidió que abandonara la sala pero aquel le contestó "écheme usted si es capaz", no pudiéndose realizar la expulsión al no haber fuerzas del orden presentes.

Este hecho es constitutivo de dos faltas contra el orden público, la primera prevista y penada en el artículo 633 del Código Penal que dice que "los que perturbaren levemente el orden en la audiencia de un tribunal o juzgado en los actos públicos, espectáculos deportivos o culturales....., serán castigados con penas de localización permanente de 2 a 12 días y multa de 10 a 30 días". La segunda falta está prevista en el artículo 634 que afirma que "los que faltaran al respeto y consideración debida a la autoridad o a sus agentes, o los desobedecieran levemente, cuando ejerzan sus funciones serán castigados con la pena de multa de 10 a 60 días".

Por su parte, el denunciado señala que sí va a recurrir pero no de la forma que indica el fallo, sino de otra, "recurriendo a todas las armas posibles para que cada uno se ponga en su sitio", refiriéndose al juez, que no le inspira confianza por ser hijo de Dolores Seijas, del PP, y al alcalde de Leiro. Indica que "es el juez que ellos necesitan".

Según Fariña para ir a la audiencia hay que tener dinero pero "buscaré la forma de poner en su sitio al poder judicial de Ribadavia y al alcalde. Añade que el juez confunde lo procesal con lo procedimental y que presentará una queja ante el Consello Xeral del poder Judicial, ya que la justicia no puede utilizar distinta vara de medir para unos y otros.