El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha iniciado obras de mejora de dos apeaderos de tren histórico, uno de ellos el de Ourense-San Francisco, en la ciudad y el de A Friela en Maside, para brindar seguridad y mejorar la imagen de ambas estaciones, pertenecientes a la red ferroviaria de ancho convencional a su paso por la provincia de Ourense.

Las obras se encuadran en el Plan de Modernización de Estaciones, impulsado por el Ministerio de Fomento para contribuir a la dinamización de la economía, y han tenido un presupuesto modesto, de 12.171 euros, pero que ha mejorado el aspecto de dos estaciones de escaso uso en la actualidad, pero simbólicas en materia ferroviaria, con el objetivo de ofrecer a sus clientes un servicio de mayor calidad con mejores prestaciones de seguridad, accesibilidad y confort.

Por lo que respecta a las obras realizadas en el apeadero de Ourense-San Francisco han consistido en la construcción de un cerramiento y la reparación de las cancelas de acceso. El nuevo cerramiento tiene 65 metros de longitud y se ha realizado sobre un muro de mampostería existente. La instalación está formada por un muro de hormigón armado y un enrejado metálico ligero, realizado a base de paneles de 2,5 m de longitud y 1,5 m de altura.

Además, se han reparado las puertas de entrada, incluyendo la sustitución de pletinas, tapas y elementos de cierre, así como la reparación de gonces, limpieza general, eliminación de óxidos y decapado de pinturas.

También se realizó la demolición del muro cercano a la puerta peatonal y la construcción de una cancela semejante a la existente. Las cancelas, una vez restauradas, fueron terminadas con dos manos de pintura tipo ferro y una mano de minio para que resistan el paso del tiempo.

A Friela, en Maside

Por otro lado las obras en el apeadero de A Friela-Maside tienen como objetivo la mejora de los accesos para personas con discapacidad, mediante la construcción de una rampa desde el acceso lateral del refugio, por el lado Ourense, con una pendiente del 6%.

También se señalizó una plaza de aparcamiento adaptada para personas con discapacidad y se delimitó una zona de parada para subida y bajada de viajeros. El proyecto incluyó una mejora del refugio mediante su limpieza y pintado.

La adecuación del aparcamiento comprende el rebaje del bordillo en una longitud de 7,5 meros para facilitar el acceso, así como la formación de una plaza de estacionamiento,.

Se señaló por último el itinerario accesible y se mejoró el estado del andén mediante la sustitución de las tapas de chapa de las arquetas.