Normalidad y confusión con la línea 7

Los usuarios del transporte urbano no advirtieron ayer cambio alguno en el servicio público que comenzó a prestar la UTE Urbanos de Ourense, del grupo Avanza, nueva adjudicataria para los próximos diez años.

Casi nadie se fijó en que una pegatina blanca con el anagrama en negro de esta nueva concesionaria tapaba el logotipo de Ourense de Transportes en los laterales de los vehículos, y que en muchos casos todavía se podía leer por debajo el nombre de la empresa anterior. La mayoría de los viajeros ni siquiera apreció el cambio de look de los conductores, que ahora lucen camisa de rayas blancas y azules y corbata azul. "Antes sólo llevábamos corbata en invierno, pero ahora forma parte del uniforme", explica uno de los chóferes. "Nadie ha notado el cambio -añade el conductor-, que fue precisamente lo que nos pidieron".

El servicio comenzó a primera hora de la mañana con tan sólo unos minutos de retraso. El tiempo que los nuevos jefes tardaron en entregar a cada conductor el boleto de billetes de reserva con el nuevo anagrama. Sólo se utilizan si fallan las máquinas expendedoras, "contratiempo que a veces ocurre", explica uno de los trabajadores.

A partir de entonces el servicio se desarrolló con normalidad. Los viajeros no advirtieron el cambio, según explicaron al apearse en sus correspondientes paradas. Muchos incluso insistían en que "los cambios son en la línea 7 que va a la Valenzá, a mí no me afectan", explica uno de los usuarios de la línea 10. Por su parte, Carmen Nespereira, que acude con frecuencia a esta localidad del concello de Barbadás, esperaba impaciente el número 7 en Xoán XXIII para ver si esta vez la llevaba a A Valenzá. "De lo contrario -añade-, me bajo en la rotonda y voy andando. No pienso coger el Anpián, antes prefiero ir a pie".

En todo caso, la jornada se desarrolló con "absoluta tranquilidad", tal y como trabajadores, clientes y responsables de la empresa se empeñaron en repetir. El traspaso coincide con el fin de semana, cuando tanto el número de viajeros como la frecuencia de los viajes disminuye de forma notable.

La oficina de atención al cliente que Ourense de Transportes tenía en Progreso ha sido adquirida por la nueva concesionaria. Ayer, en la puerta colgaba un cartel que rezaba: "Desde las 12 horas de hoy y por cambio de titularidad no hay servicio". Los que llegaron más tarde para comprar sus bonos tendrán que esperar al lunes.