Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Ourense procedieron a la detención de tres individuos, como presuntos autores de dos delitos de robo con fuerza y un delito de hurto continuado. El primero de ellos es Casimiro R.C., que la semana pasada ingresó en prisión tras numerosas detenciones por considerársele autor de otros tantos robos en viviendas, a las que accedía escalando por las fachadas.
En esta última ocasión, su detención, en la mañana del martes, responde a unos hechos ocurridos el día 29 de julio, cuando un individuo, consiguió acceder a un despacho de la Clínica Santa Teresa (Cosaga). Los agentes que realizaron la inspección ocular comprobar que el autor del incidente, entró en las dependencias, revolvió y forzó varias puertas del armario del despacho, aunque no consiguió llevarse nada de valor.
Casimiro R.C., de 33 años, pasó a disposición judicial en la mañana de ayer y quedó en libertad por orden del juez de guardia, según fuentes policiales. También en libertad quedó Olga F.P., de 40 años, que fue detenida el martes, como presunto autora del robo en varios establecimientos de la ciudad, llevándose efectos diversos. La primera de las sustracciones tuvo lugar en una tienda de la calle Progreso, en la que se llevaron objetos por valor de 7,50 euros. A la segunda de las tiendas, una perfumería, entró unos minutos más tarde. Una empleada observó que una mujer cogía algo del interior del local comercial y salía corriendo hacia el exterior. Posteriormente, comprobó que faltaban varios perfumes, por valor de 161,50 euros.
A continuación, se produjo un robo en una zapatería, en la que se sustrajo un par de zapatos valorados en 37 euros. Cuando fue detenida, Olga F.P. llevaba encima todos los objetos sustraídos.
Jamones en un contenedor
El tercero de los detenidos es Andrés Avelino R.C., de 43 años y vecino de Ourense, que pasa hoy a disposición judicial. Se le acusa, junto a otra persona que se dio a la fuga, de causar daños en un contenedor de la Avenida de la Coruña. En el cacheo hecho por los agentes, encontraron al detenido un par de guantes, un destornillador, una llave de bujías, una navaja, dos mecheros y dinero en efectivo.
En el interior del contenedor, la policía halló un radio cassette y siete jamones que el detenido negó saber de su procedencia, y de los que se pudo comprobar que eran de un establecimiento comercial ubicado en las galerías comerciales de la Avenida de A Coruña.
