La apertura del camping de Untes, paliará en parte el déficit de dotaciones de lugares de acampada que acaba de crear el cierre del camping de Leiro, cuya clausura este verano ha suprimido más de 300 plazas para el campismo en la provincia, a causa de los embargos que pesan sobre la empresa adjudicataria.

Pero podría haber novedades al respecto. La Asociación de Montes en Mancomún de Gomariz, propietaria de las 2 hectáreas de suelo mancomunal de As Esperela, sobre las que se asienta el camping, van a iniciar acciones judiciales en septiembre, para tratar de recuperar la titularidad de esos terrenos.

Eliseo Alvarado, presidente del colectivo de propietarios del suelo, explica que "nuestro letrado cree que tenemos posiblidades pues realizamos en su día una adjudicación a 50 años a esta para crear un camping, todavía faltan 10 para que venza la concesión y no se puede dejar de ofrecer ese servicio antes de que remate la adjudicación y sin previo aviso".

Afirma que la actual concesionaria "va a tratar de adjudicar a su vez a otra empresa el camping en octubre, pero pesan más 00.000 euros de embargo de la Seguridad Social y a nosotros llevaban ya cuatro o cinco años sin pagarnos el alquiler de las adjudicación y eso que era una cantidad irrisoria".

Por ello han decidido ir a la vía legal, para ver si hay alguna posibilidad sino de reabrir el camping, si de recuperar la titularidad de los terrenos en que se ubica.