Para aquellos días en los que los termómetros superan los 40 grados de termperatura, los especialistas aconsejan beber grandes cantidades de agua, zumos naturales y bebidas deportivas con sales minerales, así como consumir abundante fruta y verdura.

Los colectivos más afectados por el calor son los niños y los mayores, a los que se debe animar a beber abundante líquido y a reponer sales minerales, debido a que la sed que puedan sentir suele ser inferior a sus necesidades de agua. Al mismo tiempo, los médicos aconsejan evitar bebidas calientes y el consumo de alcohol.

Además de mantener las viviendas frescas, usar ropa ligera y evitar aglomeraciones, se deben evitar los esfuerzos físicos mientras se está expuesto al sol, es conveniente utilizar cremas de protección solar, no se debe exponer al sol a bebés ni personas mayores y no se debe dejar nunca a un ser vivo dentro de un vehículo al sol.

Golpe de calor

Se trata de una patología grave, potencialmente mortal, para la que no hay un tratamiento estándar, según el jefe del Servicio de Urgencias del CHOU, José Antonio Carballo.

Sus síntomas son una temperatura corporal alta, color rojizo en la piel, que se queda seca y caliente, pulso rápido y fuerte, dolor palpitante en la cabeza y posibles vómitos o mareos.

Esta situación se produce cuando el cuerpo no consigue controlar su propia temperatura, que en 10 o 15 minutos puede alcanzar los 39 grados y causar la muerte o deficiencias crónicas, si no se actúa con suficiente rapidez. Carballo asegura que "aún con hospitalización no se puede garantizar la recuperación del paciente", al que se debe aflojar la ropa y refrescar el cuerpo.