Ni para la imagen internacional de España ni para la colaboración con Estados Unidos es bueno que nuestro país aparezca señalado de esta forma en su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, hecho público por el Departamento de Estado de los Estados Unidos.

La pérdida de la calidad democrática en España está relacionada también con la tensión que han introducido en nuestro sistema las formaciones populistas. La pretensión de Podemos de romper con los pactos de la Transición e inaugurar una democracia populista es uno de los factores claves de la actual degradación de nuestra vida política.

Las amenazas a la libertad de expresión, reiteradamente denunciadas por la Asociación de la Prensa de Madrid, deben servir de alarma ante la degradación que se está instalando en nuestra democracia.