Estoy muy feliz de que en enero comience la vacunación en masa del COVID-19. Ya estaba optimista con este tema ya que se estos días se confirmaba que quizás los treintañeros que nos pusimos tarde la triple vírica estábamos “bastante protegidos” de la letalidad del COVID.

Lo que no me ha hecho tanta gracia es ese informe del CIS que dice que sólo existe una tercera parte de personas interesadas en vacunarse. ¿Cómo puede ser esto posible? Creo que haber dado repercusión pública a personajes negacionistas como Miguel Bosé ha hecho mucho mal en nuestra población. Y parece que nadie se acuerda de aquellos padres antivacunas (o más bien llamémoslos propandemias) al que les murió un niño por no vacunarlo. ¿Esto no es un problema de orden público? ¿No está esta gente siendo imprudentes?

En España siempre hemos acudido en masa a vacunarnos. Debemos hacerlo como parte de una responsabilidad colectiva. Y los medios tienen que informar sobre la importancia de esto. Silenciar a los propandemias y difundir a los antignorantes.

Solo así se sale de esta.