Siguiendo la línea de mi carta del día 3 de julio de 2019, en la que explicaba la dejadez administrativa en la defensa contra incendios en los alrededores de mi casa, a pesar de 14 ó 15 años de denuncias, recibo prueba nueva de las pocas ganas de dicha Administración. Me llega contestación de la Xunta dándome por desistido para desentenderse. Y no es la primera vez. Indican que no entrego licencia de construcción y certificado municipal de que la licencia corresponde a mi casa. Supongo que si no tuviese licencia sería lícito quemarnos vivos en un incendio o aplastados por un pino o no se entiende tal desistimiento forzoso.

Decir que la ilegalidad de una construcción a efectos de esta ley supone simplemente la obligación para el que construye ilegal de limpiar él mismo las brozas que le afectan, no así los árboles, y esto solamente mientras no caduque el tiempo de prescripción estipulado de seis años tras la construcción, además de poder reclamársele lucro cesante si existe. Evidentemente no desisto ni me resigno aunque me envíen siempre a por documentos como aquel que te manda a la parra por uvas en enero como simple estrategia para no hacer, buena forma de desentenderse y decir que es cosa mía, eso sí, desde la seguridad de sus hogares a salvo. En todo caso existe un galpón comunicado al ayuntamiento en 2001 (les consta), un cierre con licencia de 2008 y una casa con registro de obra nueva de 2008, con licencia, lo cual les sería indiferente porque en cualquier caso han pasado mas de los 6 años de prescripción. Y mientras tanto la broza me entra por encima del muro?

No desisto, no pueden "desistirme", solo ningunearme unos añitos más.