Acaba de rematar la ABAU 2019 en Galicia y es el momento en el que nuestros chicos tengan una semana para descansar, corregir, volver a la rutina normal después del tremendo esfuerzo que les ha supuesto este último curso de Bachiller y que marcará su paso de la vida adolescente a la vida adulta, con un montón de decisiones que marcará su futuro. Ahora ya está casi todo jugado y solo cabe esperar? y agradecer.

AGRADECER, sí en letras mayúsculas a todo el equipo que integra el Instituto Público Indalecio Pérez Tizón en Tui. Mi hijo pasó del colegio en su pueblo a cursar la ESO y posteriormente el Bachillerato ahí. No ha habido ni un solo curso donde la calidad humana de este equipo, desde los celadores a los profes, no se hubiese reflejado en los chicos. Dentro de unas instalaciones que no son las mejores, todas las carencias que pudiese haber las han suplido de sobra sus profesores. He vivido montones de detalles que pasaban de ser simples obligaciones de su puesto a realmente sentir la implicación total con sus alumnos. Desde las excursiones, las visitas, el día a día de estos chicos ha sido vigilado y tutelado por estas personas donde la disciplina y el respeto ha sido su mantra y el amor a su trabajo su bandera, de otra manera no les saldría? Cómo explicáis si no el aparecer en las pruebas iniciales de la ABAU para animarlos? y sobre todo para darles seguridad. Quiero deciros, queridos profes que cuando mi hijo lea esta carta va a poner el grito en el cielo por indiscreta pero dicen que "es de bien nacido ser agradecido" y esta etapa remata y ahora comienza otra distinta con otras preocupaciones, decisiones? en fin, pero quiero que sepáis que dudo mucho que mi hijo fuera lo que es hoy sin vuestro cuidado y cariño y creo que el resto de sus compañeros pueden decir lo mismo, habéis contribuido de una forma tremenda a su crecimiento como personas y ese amor por vuestro trabajo es lo que habéis demostrado todos estos años, motivándolos en donde los padres tenemos restringida la entrada.

Muchísimas gracias.