Hastío, incredulidad, hartura

Estoy hastiado, incrédulo y harto.

¿Por qué cuando Feijóo (ojo al dato, presidente de la Xunta, no un simple mortal) le dice a la portavoz del BNG, señora Pontón, que está necesitada, solo salen a defenderla conselleiras?

¿Dónde están los hombres?

¿Es que esto no va con nosotros?

Señores conselleiros, el machismo nos incumbe a todos los hombres que luchamos por la igualdad.

Recuerdo hace unos meses cuando un eurodiputado xenófobo, machista y misógino dijo una burrada sobre las mujeres y le contestó (¿quién sería?) lógicamente una eurodiputada vasca (los hombres estaban muy ocupados riéndole la gracia).

Una última reflexión: los jugadores de la selección mexicana de fútbol, después de un partido, se fueron a celebrarlo con señoras de muy buen ver (creo que jugaron al parchís, al Monopoly, a la gallinita ciega?); resumiendo, se montaron una orgía.

La esposa cornuda de uno de ellos se enfadó (qué sensible) y hay una petición por parte de los aficionados a través de redes sociales para que le perdone (no vaya a ser que le afecte psicológicamente a la criatura y no rinda en el terreno de juego como rindió en la celebración).

¿Si esa esposa en ausencia de su machote durante un mes que creo que dura el Mundial tuviera una calentura y se calmara con otro también le pediríais a él que le perdonara?

Señoría, no hay más preguntas.