Adiós al paro

Ante la autocomplaciencia de Rajoy y sus ministros, se me ocurre proponerles una fórmula con la que seguir reduciendo el paro y ampliando la contratación de trabajadores. Si en vez de los quinientos euros, o menos, que hoy se ofrece en los nuevos empleos, el empresario pudiera contratar solo por cien, entonces la cifra de trabajadores se doblaría. Y si en vez de despedir a los trabajadores que tienen antigüedad por equis euros, facilitamos que se haga por equis dividido entre diez, entonces nuestras empresas pasarían inmediatamente a ser más competitivas, pues el coste laboral habría mejorado respecto del diferencial que tenemos con el mundo pobre. Y voilá, el paro desapareció.

Señor Rajoy, ¿a dónde nos lleva? Cediendo usted con aquellos que le recomiendan moderación salarial y un despido más barato, precisamente para poder aumentar ellos sus ingresos, está destruyendo el país. Reúnase menos con los grandes empresarios, y más con las pymes, los autónomos y los trabajadores. Y déjese ya de autocomplaciencia.