Más diálogo

Toda mejora, avance social o económico para un pueblo siempre comporta una serie de conflictos con algún sector que se siente "amenazado". Como dice el refrán, "nunca llueve a gusto de todos". Algún sector económico incluso se atreve a chantajear, a través de la amenaza pública, al resto de la población con privarles de toda relación social o comercial para perjudicarles y obligarles a asumir sus propios intereses, de lo contrario boicotearían la compra en todos los establecimientos comerciales de la localidad.

Es cierto que cualquier trabajador de mar, tierra o aire, puede manifestar con total libertad sus opiniones en una sociedad democrática pero los responsables públicos tienen que pensar en no "insultar" a todo un pueblo que vive de su trabajo cotidiano y también tiene el derecho a manifestar libremente sus opiniones.

Los responsables de la Cofradía de Pescadores de Ribeira advierten públicamente que sus asociados no consumirán en los bares y comercios de Ribeira, que los partidos políticos son todos de la misma camarilla y que las obras del muelle comercial o se hacen o no se hacen, sin haber lugar a situaciones intermedias. Oigan señores, el pueblo de Ribeira se merece un mínimo de respeto y consideración. ¿Qué culpa tienen los negocios y empresas de la localidad? ¿Quién eligió a los responsables políticos de la Corporación Municipal? Estamos en otros tiempos y las cosas se hacen por consenso.

¿Cuántos rellenos se hicieron en nuestro municipio a pesar de los bancos marisqueros? Señores, menos chantajes para buscar el provecho particular de un único sector y pensar en el futuro general de Ribeira y la Comarca del Barbanza. Todo ello se consigue con una única palabra, diálogo, diálogo y más diálogo.

José Manuel Pena - Ribeira