Cuatro Cosas

A estas alturas deberíais tener una cosa clara: en la dirección del PPdeG pueden decir una misa en arameo y recitar los mandamientos en el griego de Homero que, a él, plim. Avecilla se refiere a Junior, el ourensano impasible, por descontado. Forjado en la escuela política familiar, uno de los centros más afamados del mundo para enseñar habilidades especiales del oficio público, al segundo de la dinastía se la refanfinfla lo que digan desde Compostela. Y desde Madrid. ¿Eh...?

El pájaro se refiere a lo de los pactos. Sí, es verdad que el prior de la orden valentiniana dio libertad –verbal, pero en campaña: debe aplicarse, por ello, la teoría de la relatividad– al PSdeG ourensano para pactar. Pero hay que tener en cuenta que lo dice cuando sabe que en las encuestas va PPrimero Cabezas, y eso abre posibilidades, entre ellas –poco probable si suman con el BNG–, hasta que repita la jugada del Nene en 2019, al revés, con los jacomitas. Si fuere menester...

Anacleto, que sigue las jugadas desde muy cerca, avisa otra vez de que, uno) si está en juego la única posibilidad de mantener la Diputación que ahora mismo tiene el PPdeG, no debéis descartar ni los juramentos. La milicia baltariana ya tiene un grito de guerra para revocarlos: “¡Recordad Santa Gadea...!”, dirán, aún recordando que la jura le costó el destierro al Mío Cid, y que este se quedó con sólo “doce de los suyos”, escribió Machado (Manuel). Ojito...

Eso aparte, conviene que no perdáis de vista un detalle serio: O Nene tiene a su disposición las siglas de “Centristas de Galicia”, y el Reino, cuatro provincias que pueden colocarse una a una como adjetivos al sustantivo. Y, después del 28/M, si le tocan mucho los pinreles, lo mismo va y moja. Y, con él, la gran mayoría de los cargos electos ese día. Lo que dejaría pequeña, al menos por unos meses, a la Revolución Francesa de 1789. ¿Capisci...?

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