La utilización electoral de los cargos institucionales está en el ADN del Partido Popular, tanto desde el gobierno, como desde la oposición. En esta ciudad vivimos durante décadas gobiernos que “volatilizaban” recursos públicos, pero que no eran capaces de dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos.

El compromiso con las necesidades del Gobierno de Abel Caballero se ha visto recompensado con un apoyo electoral insólito en toda Europa, 20 de 27 concejales y más del 67% de los votos. Vigo se cansó y afortunadamente abandonó para siempre a esos falsos profetas que hablan, escriben y prometen cuando están en la oposición, pero que cuando toca gobernar manifiestan todo su sectarismo y su incompetencia.

¿Cómo puede decir la representante de la Xunta en Vigo que la sanidad está en el centro de sus preocupaciones? ¿No escucha a los pacientes, al personal sanitario, a los sindicatos? ¿No es consciente del atraco a las arcas públicas que ha supuesto la construcción del Hospital Álvaro Cunqueiro? El desastre ha sido tal que la Xunta de Feijóo, Rueda y su representante en Vigo, Fernández-Tapias, nos han convertido en conejillos de indias… ningún nuevo hospital en Galicia se va a construir con el método del Cunqueiro.

Y seguimos sumando. Aún estamos esperando a que Feijóo nos explique su negativa a la construcción de la autovía a O Porriño en túnel o por qué siguen poniendo obstáculos a la Biblioteca del Estado en Vigo en la que ya trabaja el Gobierno de España.

La ciudad de Vigo camina con paso firme y exitoso liderada por Abel Caballero y va ocupando en términos de liderazgo la posición que le corresponde. En el ámbito económico y productivo la iniciativa privada fue capaz de hacerlo durante décadas sin el apoyo de su Ayuntamiento; ahora con el impulso municipal esta ciudad está siendo imparable.

La proyección turística y la mejora de la imagen exterior de la ciudad sólo es cuestionada por aquellos que en el fondo desean que Vigo pierda para que otros ganen. Efectivamente, quince años de gobierno presidido por Abel Caballero… somos la ciudad con mejor calidad de vida de España y el turismo nacional e internacional no deja de crecer, incluso en momentos tan difíciles como los actuales.

Hemos situado a Vigo en el mundo, y hemos hecho de Vigo una ciudad más amable para las personas, tanto para la población local, como para los visitantes, y casi todos, excepto los malintencionados, lo entendemos así. Quien hace campaña electoral desde su puesto institucional no es capaz de verlo.

*Concelleiro de Cultura